La Mandrágora
La planta que soñaba con ser humana
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La mandrágora, o mandrake en inglés, (vocablo griego, que significa dañino para el ganado) es una planta perteneciente a la familia de las solanáceas.
Sus raíces han sido usadas a lo largo de la historia en innumerables rituales mágicos, ya que sus bifurcaciones tienen un extraño parecido a una figura humana e incluso, en distintos textos de magia antigua, se habla de ella con verdadero culto adjudicándole poderes y facultades increíbles.
Es notable por la influencia que ejerció en Europa durante el medioevo.
Los campesinos de aquellos tiempos le tenían un gran temor porque creían que poseía ciertas características humanas debido a estas bifurcaciones que daban el aspecto de un par de piernas, aunque también contribuyeron mucho a la celebridad de esta planta los charlatanes que vendían su raíz en altísimos precios, gracias a las cualidades que le atribuían y a las que el vulgo daba completo crédito.
Crece fundamentalmente en Europa, el norte de Africa y Asia occidental, sus raíces son gruesas de color blancuzco y habitualmente presentan tres bifurcaciones o más, el tallo es de color verde oscuro sus hojas son anchas y con una superficie rugosa y tienen el mismo color del tallo, las flores salen del centro, y son de color blanco violáceo, el fruto aparece en otoño, tiene color amarillo o naranja, y aspecto similar a una manzana pequeña pero de olor fétido.
Se supone que Julieta empleó un elixir preparado con mandrágora para fingir su muerte, mientras que Romeo se envenenó utilizando una poción compuesta por acónito.
Tuvo varios nombres, Pitágoras la llamó antropomorfa; Columelasimilis-homo; árbol de cara de hombre, en la tradición popular, hombrecillo plantado, y Plinio habría dicho que la mandrágora blanca es el macho y la negra es la hembra.
Un médico francés aseguraba que la mandrágora crecía bajo los patíbulos donde caían los líquidos de los cadáveres, particularmente el esperma de hombres colgados, licuándose y cayendo con la grasa gota a gota en la tierra.
Fue protagonista de muchas leyendas y rituales, los magos hacían con ella algo similar a una figura humana, tallándola y presionando la raíz a cierta altura para formar un supuesto cuello, cortando todas las bifurcaciones excepto cuatro, que serían las extremidades.
Durante la Edad Media era utilizada por las brujas para sus diferentes rituales y ungüentos.
RITOS PARA CORTAR LA MANDRÁGORA
Supuestamente, el poseedor de una mandrágora se vería dichosamente influido por ella otorgándole poderes y conocimientos más allá de lo imaginado, pero su extracción se consideraba altamente peligrosa y necesitaba de la realización de específicos rituales para lograr poseerla sin morir en el intento.
Se creía que cuando se la arrancaba del suelo, el hombrecillo encerrado en ella despedía gritos lastimeros y agudos gemidos.
Además, era menester arrancarla de debajo de una horca, observando estrictos ritos particulares, y aún así, solamente en determinadas condiciones se podía disfrutar de todas sus propiedades.
Por ejemplo se aconsejaba trazar tres círculos con una espada en torno a la planta y arrancarla mirando al Oriente.
Otro procedimiento indicaba que como se suponía que los gemidos que emitía la planta eran capaces de matar a quien los escuchara, en la Edad Media ataban con una larga soga a un perro hambriento al cuello de la raíz de la planta, ponían fuera de su alcance un pedazo de carne y se alejaban a todo correr.
Cuando el pobre animal, tirando de la cuerda arrancaba la mandrágora, era él quien oía y soportaba los gritos que le daban la muerte.
USADA POR BRUJOS Y MAGOS
Según comentan expertos esoteristas, la mayor parte de los procesos de la Inquisición tuvieron como cuerpo del delito manipulaciones con mandrágora y se dice que el arzobispo Eberhaard murió en el año 1066 debido a un maleficio hecho con esta hierba, por lo que sobre su tumba hay una lápida que hasta hoy mismo es admirada por los turistas donde se relata este hecho.
Se dice que los magos médicos se ocupaban de esta planta "para extraerle la parte de Dios que cura enfermedades", mientras que los brujos la usaban para hacer el mal.
Según las leyendas, la magia blanca obtenía excelentes resultados de esta planta utilizándola para curar, entre otras, distintas enfermedades de los órganos sexuales, los riñones y el bazo.
En el cine y la literatura moderna, es citada en una de las novelas de Harry Potter donde le enseñan sus propiedades a los aprendices de mago; y en la película El Laberinto del Fauno es utilizada para impedir un aborto espontáneo.
COMPOSICIÓN QUÍMICA
Químicamente está formada por alcaloides, tales como atropina y escopolamina.
Se usaba como anestésico, ya que estas sustancias merman los impulsos nerviosos. En grandes dosis puede ser usada como estimulante, y en cierta cantidad es incluso venenosa.
USOS TERAPÉUTICOS
Fuera de la magia, en la medicina antigua, las hojas de mandrágora hervidas en leche se aplicaban en las úlceras; la raíz fresca se usaba como purgante; y macerada y mezclada con alcohol se administraba oralmente para producir sueño o analgesia en dolores reumáticos, ataques convulsivos e incluso de melancolía.